👋🏼 ¿Cómo estás?
Esta carta me ha salido inmensa. Perdóname. Así que la divido en dos. Galápagos bien merece dos misivas!
Yo te cuento qué me asombró, ¿me cuentas tú de qué te ha provocado sorpresa, pasmo y admiración?
✍🏼 En Galápagos no existe el low cost, pero creo que es una decisión sabia.
Es una estrategia para limitar el número de humanos y su impacto en este edén, pero asegurándose que los dólares fluyan para proteger al Parque Nacional.
Aunque el Galápagos barato no existe, hay la opción de elegir bases terrestres en las islas habitadas y olvidarse de los yates que saltan de isla en isla.
Esa fue mi decisión, que me permitió alargar la estancia a 11 días y como bonus me permitió contactar con los locales.
Estas son mis impresiones, lo que me asombró y quedó en mí. Lo cuento como haría en una terracita, con un vinito tinto y hablando con alguien querido.
🌋 Un planeta de lava
En Galápagos hay que ir bien calzados.
Todas las islas son volcánicas y, fuera de playas y ciudades, el suelo es lava.
La hay lisa y suave, llamada pahoehoe – nombre popular entre los negocios–, y la picuda e irregular, conocida formalmente como A`a y popularmente por la onomatopeya AUCH, AUCH.
No es territorio para chanclas, porque si resbalas, te estrellas, con el dolor añadido de que, habitualmente, la única flora a mano para agarrarse es un cactus Opuntia Galapageia. Simplemente estamparse es la opción más acertada.
Las erupciones en Galápagos no son extrañas, la última, el mes pasado en Fernandina. De esa prolífica actividad volcánica nacieron las islas.
👉🏼 Las islas más antiguas son las del este. Desde que yo nací, hace poco más de medio siglo, San Cristóbal y Española están metro y medio más cerca del continente. Lentamente, pero sin pausa, se desplazan.
Pero las erupciones también causaron la desaparición de islas, al menos formalmente.
👉🏼 Isabela es un conglomerado de cinco volcanes. Sus lavas chocaron y se unieron dando lugar a la isla más grande.
Y también influyeron en la evolución de las especies.
👉🏼 Según explican en el Centro de Crianza Arnaldo Tupiza donde se ven tortugas gigantes de Sierra Negra y Cerro Azul, ambas son genéticamente iguales, pero lucen diferentes.
Unas tienen caparazón como una cúpula y el cuello corto, mientras que las otras tienen la concha plana y el pescuezo largo. El cambio se originó en una erupción.
Las tortugas de Sierra Negra solían desplazarse a Cerro Azul para desovar, atraídas por su mayor sequedad, pero la lava que escupió el volcán cerró el camino y las separó.
La nueva realidad era que para comer había cactus y poco más. Para llegar al alimento necesitaban un cuello más largo, pero era imposible con una concha abombada. Y la evolución entró en movimiento.
Es posible visitar el volcán de Sierra Negra:
asomarse a la caldera de más de 10 km de diámetro
pasmarse con los cráteres que vomitaron lava en 2016 y 2018
y caer en los lugares comunes de “es como Marte” para describir el descenso entre lava y polvo al volcán Chico.
14 km estupendos entre la ida y la vuelta, trepando y descendiendo entre AUCH, AUCH
🌊 Las corrientes marítimas
En Galápagos confluyen las corrientes marítimas de Humboldt, Cromwell y Panamá, creando un festín animal.
Es el lugar ideal para bucear, aunque la fuerza de las corrientes restringe los lugares seguros a los buzos novatos como yo, que sólo buceé en Mosquera y Daphne.
A falta de buceo, snorkeling, abierto a todos y en todas partes.
Es imposible no nadar entre bancos de sardinas y arenques o de peces de colores como damiselas, con sus ojitos hipnóticos azules y morritos amarilos. A los sargentos mayores, con sus “galones” negros. También son abundantes los bellos cirujanos y los coloridos loras.
Es fácil perder la cuenta del número de tortugas vistas comiendo algas o nadando ágilmente sin chocarse con los humanos. También de tiburones punta negra y los tintoreras que yacen descansando sobre el fondo marino durante del día.
Aunque en algunos sitios como León Dormido son abundantes los martillo, yo no los vi. Son animales salvajes, en libertad. Se mueven y a veces los ves y otras no. No es un zoo y eso es lo hermoso.
En Isabela se repiten los avistamientos de los pingüinos. Cuando nadan en la superficie parecen patos pero cuando bucean se propulsan elegantemente con sus alas, que en Tierra no les sirven para volar. Me enamoraron.
👉🏼 Se cree que llegaron a Galápagos hace unos cuatro millones de años, arrastrados desde Antártida por la corriente fría de Humboldt.
👉🏼 En su nuevo hogar evolucionaron para vivir en el trópico y se hicieron chiquitos, nunca sobrepasando el medio metro.
👉🏼 Hoy son los únicos pingüinos en el hemisferio Norte
👉🏼 Están en peligro ya que hay menos de 1.000 parejas reproductoras. Su gran enemigo, que no el único, es el cambio de clima que la corriente de El Niño trae periódicamente: elimina la comida y extermina a los pingüinos.
Los leones marinos de dos pelos y las iguanas marinas se ven por doquier, incluidas las playas. Las crías de león nadan con los humanos buscando el juego. Los iguana macho nadan y bucean, pero sin buscar el contacto.
🐢 Endémico, nativo y plaga
De los endémicos, que sólo hay en Galápagos, y los nativos que son del archipiélago pero también de otros lugares del pacífico me fascinaron varios.
📌 De la tortuga gigante me sobrecogió su soledad. En libertad sólo se ven dos juntas si es para aparearse o para compartir un charco de lodo.
Si pasas a su lado, se paran o se echan al suelo. Si se asustan, esconden patas, cola, cabeza y cuello. Más de un siglo con su caparazón a cuestas, siempre solas.
Son iluminadoras las visitas a los centros de crianza, que aspiran a recuperar sus números, diezmados por décadas de depredación.
👉🏼 Sus números mermaron por la caza para devorar su carne o para obtener su aceite, para iluminar la ciudad de Guayaquil.
👉🏼 También por el horror causado por los animales domésticos introducidos por los humanos como gatos, cabras y caballos y pestes como las ratas y las hormigas. En cuatro siglos extinguieron cuatro de las especies y forzaron la caída drástica de los números de las que perviven.
📌 La iguana marina quien, en su fealdad, es bella.
Se cree que iguanas terrestres llegaron a Galápagos en troncos o escombros arrastrados por las corrientes marinas y una vez en el archipiélago, las que acabaron en las partes con menos plantas, evolucionaron y se hicieron marinas para comer algas.
El macho puede bucear hasta media hora, mientras su temperatura desciende hasta 10 ºC. Las hembras o las crías sólo se meten al agua para comer y en marea baja. Después necesitan tomar el sol para calentar la sangre y recuperar las fuerzas.
Mientras descansan, se las oye resoplar. Parecen enfadadas, pero no. Es la evolución trabajando. Están expulsando por las narices el exceso de sal que sus cuerpos atrapan en sus excursiones marinas.
Son pacíficas, aunque los machos se pelean para conquistar hembra con la que desean aparearse. También las hembras tienen sus agarradas, pero para dilucidar quién se queda con el mejor lugar para poner sus huevos. Machos y hembras guerrean igual: chocando las cabezas.
Y un último comentario sobre mi galapagueño favorito: lucen un color negruzco, para conservar el calor. Excepto en los dos meses de apareamiento, cuando los machos se vuelven multicolores, coquetos, casi floridos. Es el juego universal de ligar.
📌 Entre las aves fascinantes todos los turistas quieren ver al piquero de patas azules, que las tiene sólo así si está bien alimentado. Es un ave gracioso y nativo, que no endémico, de Galápagos. Pero mi gusto se va más por la fragata, aún cuando no sea época de apareamiento y el macho no infle su pecho como si fuera un globo rojo.
Las fragatas pueden pasar del metro y planean elegantemente sobre las playas y el mar, girando rápido al mover a su antojo las hojas su cola de tijera. Están buscando a su presa, porque son carnívoras.
Pero no pescan porque tienen una gran debilidad: sus plumas son permeables y, si se mojan, se pueden ahogar. Eso las destierra a ser ladronas de la caza de pelícanos y piqueros. Ahí son hábiles. La naturaleza de los animales no entiende de éticas humanas.
…continuará la próxima semana, hablando de humanos y gastos.
Y recuerda, cuéntame lo que a ti te asombra. Quiero saber. Puedes comentar esta carta en Substack o, si lo prefieres, enviarme un email dándole contestar a este mensaje.
Hasta pronto!
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🥰 Gracias mil por estar ahí.
😘 Esta carta la he escrito desde Manta, costa del Pacífico. Ecuador.
La evolución por el comer de los galápagos me ha llamado mucho la atención
Me quedo con el piquero de katiuskas azules! Qué guapo!! Gracias por presentármelo